viernes, 6 de noviembre de 2009

Natalina López!

Natalina López era una de las personas más simpáticas del mundo, por la mañana, al mediodía o a la nochecita, según su agitada jornada, ella regresaba.
Siempre entre gatillo fácil, detenciones arbitrarias y torturas carcelarias, ella tejía bufandas urbanas sin agujas mientras fumaba.
Risueña y altiva se convertía en carmelita descalza sí se lo proponían, pero sólo en hoteles de principios de siglo y si la paga era buena.
No viajaba hacia ninguna parte, aún que, con palabras recorría castillos de arena, balnearios municipales y montañas incendiadas.
Sin sombra se quedaba y una campanas de dolor en el pecho, acostumbrada a callar y obedecer cuando la sirena suena!.